En este jardín con piscina se planteó como fundamental la integración de los diferentes elementos: porche, solarium y piscina son un todo que da paso al jardín.
La propuesta del jardín combina la madera de IPE con el mármol del porche y los acabados del jardín. Se puso un especial cuidado en las transiciones entre pavimentos con franjas de grava y detalles sutiles que mejoran la sensación del jardín y su mantenimiento.
Para aumentar el espacio disponible se propuso una plantación de borde con trepadoras y setos vegetales, combinados con plantaciones de aromáticas y plantas vivaces que aportan floraciones estivales y dan color al jardín.
Un jardín con piscina de mínimo mantenimiento para disfrutar todo el año.