La terraza de este ático ubicado en Majadahonda se plantea como un espacio cálido y acogedor. La llegada de un nuevo miembro a la familia es siempre una gran alegría pero también es un momento de cambios y una fuente de preocupaciones, una de ellas la falta de seguridad de la barandilla de la terraza.
De nuevo con la madera volvemos a conseguir un efecto de continuidad suelo – pared que mejora la continuidad espacial y permite ampliar visualmente los espacios exteriores. Una reforma en la terraza que transforma el espacio y consigue dar comodidad y seguridad ya que se cubre por completo la barandilla existente que era fácilmente escalable.
La madera de ipe de exterior viste el suelo y el frente formando las jardineras que se llenan de plantas.